El cáncer de endometrio comienza en el revestimiento del útero, llamado endometrio.
El cáncer de endometrio es un tipo de cáncer que comienza como un crecimiento de células en el útero. El útero es el órgano pélvico hueco, con forma de pera, donde ocurre el desarrollo fetal.
El cáncer de endometrio comienza en la capa de células que forman el revestimiento del útero, llamado endometrio. El cáncer de endometrio a veces se llama cáncer uterino. Otros tipos de cáncer pueden formarse en el útero, incluyendo el sarcoma uterino, pero son mucho menos comunes que el cáncer de endometrio.
El cáncer de endometrio a menudo se detecta en una etapa temprana porque causa síntomas. A menudo, el primer síntoma es sangrado vaginal irregular. Si el cáncer de endometrio se detecta temprano, extirpar quirúrgicamente el útero a menudo lo cura.
Los síntomas del cáncer de endometrio pueden incluir: Sangrado vaginal después de la menopausia. Sangrado entre periodos. Dolor pélvico. Agende una cita con un profesional de la salud si experimenta algún síntoma que le preocupe.
Pida una cita con un profesional de la salud si experimenta algún síntoma que le preocupe.
Se desconoce la causa del cáncer de endometrio. Lo que se sabe es que algo sucede a las células del revestimiento del útero que las transforma en células cancerosas.
El cáncer de endometrio comienza cuando las células del revestimiento del útero, llamado endometrio, sufren cambios en su ADN. El ADN de una célula contiene las instrucciones que le dicen a la célula qué hacer. Los cambios le indican a las células que se multipliquen rápidamente. Los cambios también le indican a las células que continúen viviendo cuando las células sanas morirían como parte de su ciclo de vida natural. Esto causa una gran cantidad de células adicionales. Las células pueden formar una masa llamada tumor. Las células pueden invadir y destruir el tejido corporal sano. Con el tiempo, las células pueden desprenderse y diseminarse a otras partes del cuerpo.
Los ovarios, las trompas de Falopio, el útero, el cuello uterino y la vagina (canal vaginal) constituyen el sistema reproductor femenino.
Factores que aumentan el riesgo de cáncer de endometrio incluyen:
Cambios en el equilibrio hormonal del cuerpo. Las dos hormonas principales que producen los ovarios son el estrógeno y la progesterona. Los cambios en el equilibrio de estas hormonas provocan cambios en el endometrio.
Una enfermedad o afección que aumenta la cantidad de estrógeno, pero no el nivel de progesterona, en el cuerpo puede aumentar el riesgo de cáncer de endometrio. Algunos ejemplos incluyen la obesidad, la diabetes y los patrones de ovulación irregulares, que pueden ocurrir en el síndrome de ovario poliquístico. Tomar medicamentos de terapia hormonal que contienen estrógeno pero no progestina después de la menopausia aumenta el riesgo de cáncer de endometrio.
Un tipo poco frecuente de tumor ovárico que libera estrógeno también puede aumentar el riesgo de cáncer de endometrio.
Más años de menstruación. Comenzar la menstruación antes de los 12 años o comenzar la menopausia más tarde aumenta el riesgo de cáncer de endometrio. Cuantos más períodos menstruales haya tenido, más exposición habrá tenido su endometrio al estrógeno.
Nunca haber estado embarazada. Si nunca ha estado embarazada, tiene un mayor riesgo de cáncer de endometrio que alguien que ha tenido al menos un embarazo.
Edad avanzada. A medida que envejece, aumenta su riesgo de cáncer de endometrio. El cáncer de endometrio ocurre con mayor frecuencia después de la menopausia.
Obesidad. La obesidad aumenta el riesgo de cáncer de endometrio. Esto puede ocurrir porque la grasa corporal adicional puede alterar el equilibrio hormonal de su cuerpo.
Terapia hormonal para el cáncer de mama. Tomar el medicamento de terapia hormonal tamoxifeno para el cáncer de mama puede aumentar el riesgo de desarrollar cáncer de endometrio. Si está tomando tamoxifeno, hable sobre el riesgo con su equipo de atención médica. Para la mayoría, los beneficios del tamoxifeno superan el pequeño riesgo de cáncer de endometrio.
Un síndrome hereditario que aumenta el riesgo de cáncer. El síndrome de Lynch aumenta el riesgo de cáncer de colon y otros cánceres, incluido el cáncer de endometrio. El síndrome de Lynch es causado por un cambio en el ADN que se transmite de padres a hijos. Si un miembro de la familia ha sido diagnosticado con el síndrome de Lynch, pregunte a su equipo de atención médica sobre su riesgo de este síndrome genético. Si le han diagnosticado el síndrome de Lynch, pregunte qué exámenes de detección de cáncer necesita.
Cambios en el equilibrio hormonal del cuerpo. Las dos hormonas principales que producen los ovarios son el estrógeno y la progesterona. Los cambios en el equilibrio de estas hormonas provocan cambios en el endometrio.
Una enfermedad o afección que aumenta la cantidad de estrógeno, pero no el nivel de progesterona, en el cuerpo puede aumentar el riesgo de cáncer de endometrio. Algunos ejemplos incluyen la obesidad, la diabetes y los patrones de ovulación irregulares, que pueden ocurrir en el síndrome de ovario poliquístico. Tomar medicamentos de terapia hormonal que contienen estrógeno pero no progestina después de la menopausia aumenta el riesgo de cáncer de endometrio.
Un tipo poco frecuente de tumor ovárico que libera estrógeno también puede aumentar el riesgo de cáncer de endometrio.
Para reducir el riesgo de cáncer de endometrio, puede considerar:
Durante una ecografía transvaginal, un profesional o técnico de la salud utiliza un dispositivo similar a una varita llamado transductor. El transductor se inserta en la vagina mientras usted está acostada boca arriba en una mesa de exploración. El transductor emite ondas sonoras que generan imágenes de sus órganos pélvicos.
Durante la histeroscopia (his-tur-OS-kuh-pee), un instrumento delgado e iluminado proporciona una vista del interior del útero. Este instrumento también se llama histeroscopio.
Las pruebas y procedimientos utilizados para diagnosticar el cáncer de endometrio incluyen:
Examen de la pelvis. Un examen pélvico revisa los órganos reproductivos. A menudo se realiza durante un chequeo regular, pero podría ser necesario si tiene síntomas de cáncer de endometrio.
Si se encuentra cáncer de endometrio, es probable que lo deriven a un médico especializado en el tratamiento de cánceres que afectan el sistema reproductivo, llamado oncólogo ginecológico.
Una vez que se haya diagnosticado su cáncer, su equipo de atención médica trabajará para determinar la extensión de su cáncer, llamada estadio. Las pruebas utilizadas para determinar el estadio de su cáncer pueden incluir una radiografía de tórax, una tomografía computarizada, análisis de sangre y tomografía por emisión de positrones, también llamada tomografía PET. Es posible que el estadio de su cáncer no se conozca hasta después de que se someta a una cirugía para tratarlo.
Su equipo de atención médica utiliza la información de estas pruebas y procedimientos para asignar un estadio a su cáncer. Los estadios del cáncer de endometrio se indican con números del 1 al 4. El estadio más bajo significa que el cáncer no ha crecido más allá del útero. En el estadio 4, el cáncer ha crecido hasta afectar órganos cercanos, como la vejiga, o se ha diseminado a áreas distantes del cuerpo.
El cáncer endometrial generalmente se trata primero con cirugía para extirpar el cáncer. Esto puede incluir la extirpación del útero, las trompas de Falopio y los ovarios. Otras opciones de tratamiento pueden incluir radioterapia o tratamientos con medicamentos para destruir las células cancerosas. Las opciones para tratar su cáncer endometrial dependerán de las características de su cáncer, como el estadio, su salud general y sus preferencias.
El tratamiento del cáncer endometrial generalmente implica una operación para extirpar el útero, llamada histerectomía. El tratamiento también suele incluir la extirpación de las trompas de Falopio y los ovarios, llamada salpingooforectomía. Una histerectomía hace imposible que usted quede embarazada en el futuro. Además, una vez que le extirpen los ovarios, experimentará la menopausia si aún no lo ha hecho.
Durante la cirugía, su cirujano también inspeccionará las áreas alrededor de su útero para buscar signos de que el cáncer se haya propagado. Su cirujano también puede extirpar ganglios linfáticos para analizarlos. Esto ayuda a determinar el estadio de su cáncer.
La radioterapia utiliza energía potente para destruir las células cancerosas. La energía puede provenir de rayos X, protones u otras fuentes. En ciertas situaciones, se puede recomendar radioterapia antes de la cirugía. La radioterapia puede reducir el tamaño de un tumor y facilitar su extirpación.
Si no tiene la salud suficiente para someterse a una cirugía, puede optar solo por radioterapia.
La radioterapia puede incluir:
La quimioterapia utiliza medicamentos fuertes para destruir las células cancerosas. Algunas personas reciben un medicamento de quimioterapia. Otras reciben dos o más medicamentos juntos. La mayoría de los medicamentos de quimioterapia se administran a través de una vena, pero algunos se toman en forma de píldoras. Estos medicamentos ingresan al torrente sanguíneo y luego viajan por el cuerpo, destruyendo las células cancerosas.
La quimioterapia a veces se usa después de la cirugía para reducir el riesgo de que el cáncer regrese. La quimioterapia también se puede usar antes de la cirugía para reducir el tamaño del cáncer. Esto hace más probable que el cáncer se extirpe por completo durante la cirugía.
Se puede recomendar quimioterapia para tratar el cáncer endometrial avanzado que se ha propagado más allá del útero o para tratar el cáncer que ha regresado.
La terapia hormonal implica tomar medicamentos para reducir los niveles hormonales en el cuerpo. En respuesta, las células cancerosas que dependen de las hormonas para ayudarlas a crecer podrían morir. La terapia hormonal puede ser una opción si tiene cáncer endometrial avanzado que se ha propagado más allá del útero.
La terapia dirigida utiliza medicamentos que atacan sustancias químicas específicas en las células cancerosas. Al bloquear estas sustancias químicas, los tratamientos dirigidos pueden causar la muerte de las células cancerosas. La terapia dirigida generalmente se combina con quimioterapia para tratar el cáncer endometrial avanzado.
La inmunoterapia utiliza medicamentos que ayudan al sistema inmunitario del cuerpo a destruir las células cancerosas. El sistema inmunitario combate las enfermedades atacando gérmenes y otras células que no deberían estar en el cuerpo. Las células cancerosas sobreviven escondiéndose del sistema inmunitario. La inmunoterapia ayuda a las células del sistema inmunitario a encontrar y destruir las células cancerosas. Para el cáncer endometrial, se podría considerar la inmunoterapia si el cáncer está avanzado y otros tratamientos no han ayudado.
Los cuidados paliativos son un tipo especial de atención médica que le ayuda a sentirse mejor cuando tiene una enfermedad grave. Si tiene cáncer, los cuidados paliativos pueden ayudar a aliviar el dolor y otros síntomas. Los cuidados paliativos son realizados por un equipo de profesionales de la salud. Esto puede incluir médicos, enfermeras y otros profesionales especialmente capacitados. Su objetivo es mejorar la calidad de vida para usted y su familia.
Los especialistas en cuidados paliativos trabajan con usted, su familia y su equipo de atención para ayudarlo a sentirse mejor. Brindan una capa adicional de apoyo mientras recibe tratamiento contra el cáncer. Puede recibir cuidados paliativos al mismo tiempo que tratamientos contra el cáncer fuertes, como cirugía, quimioterapia o radioterapia.
Cuando los cuidados paliativos se utilizan junto con todos los demás tratamientos apropiados, las personas con cáncer pueden sentirse mejor y vivir más tiempo.
Después de recibir un diagnóstico de cáncer endometrial, es posible que tenga muchas preguntas, miedos y preocupaciones. Cada persona finalmente encuentra una manera de sobrellevar un diagnóstico de cáncer endometrial. Con el tiempo, encontrará lo que le funciona. Hasta entonces, podría intentar:
Descargo de responsabilidad: August es una plataforma de información de salud y sus respuestas no constituyen asesoramiento médico. Siempre consulte con un profesional médico licenciado antes de realizar cualquier cambio.
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