La infección por Giardia es una infección intestinal que se caracteriza por calambres estomacales, distensión abdominal, náuseas y episodios de diarrea acuosa. La infección por Giardia es causada por un parásito microscópico que se encuentra en todo el mundo, especialmente en áreas con saneamiento deficiente y agua no potable.
La infección por Giardia (giardiasis) es una de las causas más comunes de enfermedades transmitidas por el agua en los Estados Unidos. Los parásitos se encuentran en arroyos y lagos del interior, pero también en los suministros públicos de agua, piscinas, spas de hidromasaje y pozos. La infección por Giardia se puede propagar a través de los alimentos y el contacto de persona a persona.
Las infecciones por Giardia generalmente desaparecen en pocas semanas. Pero puede tener problemas intestinales mucho después de que los parásitos hayan desaparecido. Varios medicamentos suelen ser eficaces contra los parásitos de Giardia, pero no todas las personas responden a ellos. La prevención es su mejor defensa.
Algunas personas con infección por Giardia nunca desarrollan signos o síntomas, pero aún así portan el parásito y pueden contagiarlo a otros a través de sus heces. En quienes sí se enferman, los signos y síntomas suelen aparecer entre una y tres semanas después de la exposición y pueden incluir:
Los signos y síntomas de la infección por Giardia pueden durar de dos a seis semanas, pero en algunas personas duran más tiempo o reaparecen.
Llame a su médico si tiene heces blandas, calambres y distensión abdominal, y náuseas que duran más de una semana, o si se deshidrata. Asegúrese de informarle a su médico si corre riesgo de infección por giardia; es decir, si tiene un niño en una guardería, si ha viajado recientemente a un área donde la infección es común o si ha tragado agua de un lago o arroyo.
Los parásitos de Giardia viven en los intestinos de personas y animales. Antes de que los parásitos microscópicos se eliminen en las heces, se encapsulan dentro de cubiertas duras llamadas quistes, lo que les permite sobrevivir fuera de los intestinos durante meses. Una vez dentro de un huésped, los quistes se disuelven y se liberan los parásitos.
La infección ocurre cuando accidentalmente se ingieren los quistes del parásito. Esto puede ocurrir al ingerir agua contaminada, al comer alimentos infectados o mediante el contacto de persona a persona.
El parásito de Giardia es un parásito intestinal muy común. Aunque cualquiera puede contraer parásitos de Giardia, algunas personas tienen un riesgo especialmente alto:
La infección por Giardia casi nunca es mortal en los países industrializados. Pero puede causar síntomas persistentes y complicaciones graves, especialmente en bebés y niños. Las complicaciones más comunes incluyen:
Ningún medicamento o vacuna puede prevenir la infección por giardia. Pero las precauciones de sentido común pueden contribuir en gran medida a reducir las posibilidades de infectarse o de propagar la infección a otras personas.
Para ayudar a diagnosticar una infección por giardia (giardiasis), es probable que su médico le haga una prueba de muestra de heces. Para mayor precisión, es posible que se le pida que entregue varias muestras de heces recolectadas durante un período de días. Las muestras se examinan luego en un laboratorio para detectar la presencia de parásitos. Las pruebas de heces también se pueden usar para controlar la efectividad de cualquier tratamiento que reciba.
Los niños y adultos con infección por Giardia sin síntomas generalmente no necesitan tratamiento a menos que sea probable que propaguen los parásitos. Muchas personas que sí tienen problemas a menudo mejoran por sí solas en unas pocas semanas.
Cuando los signos y síntomas son graves o la infección persiste, los médicos generalmente tratan la infección por Giardia con medicamentos como:
No existen medicamentos recomendados de forma consistente para la infección por Giardia durante el embarazo debido al potencial de efectos nocivos de los medicamentos para el feto. Si sus síntomas son leves, su médico puede recomendar retrasar el tratamiento hasta después del primer trimestre o más. Si es necesario el tratamiento, hable con su médico sobre la mejor opción de tratamiento disponible.
Si bien inicialmente puede plantear sus síntomas a su médico de cabecera, él o ella puede derivarlo a un gastroenterólogo, un médico especializado en trastornos del sistema digestivo.
Antes de su cita, es posible que desee escribir una lista de respuestas a las siguientes preguntas:
Durante el examen físico, su médico puede pedirle que se acueste para poder presionar suavemente varias partes de su abdomen y verificar si hay áreas sensibles. También puede revisar su boca y piel en busca de signos de deshidratación. También puede recibir instrucciones sobre cómo traer una muestra de sus heces.
Descargo de responsabilidad: August es una plataforma de información de salud y sus respuestas no constituyen asesoramiento médico. Siempre consulte con un profesional médico licenciado antes de realizar cualquier cambio.
Hecho en India, para el mundo