La fascitis plantar es una inflamación del tejido fibroso (fascia plantar) a lo largo de la planta del pie que conecta el hueso del talón con los dedos. La fascitis plantar puede causar un intenso dolor en el talón.
La fascitis plantar (PLAN-tar fas-e-I-tis) es una de las causas más comunes de dolor en el talón. Implica la inflamación de una banda gruesa de tejido que recorre la planta de cada pie y conecta el hueso del talón con los dedos, conocida como fascia plantar.
La fascitis plantar comúnmente causa un dolor punzante que a menudo ocurre con los primeros pasos de la mañana. Al levantarse y moverse, el dolor normalmente disminuye, pero puede volver después de largos períodos de estar de pie o al levantarse después de estar sentado.
La causa de la fascitis plantar no se comprende bien. Es más común en corredores y en personas con sobrepeso.
La fascitis plantar suele causar un dolor punzante en la planta del pie, cerca del talón. El dolor suele ser más intenso en los primeros pasos después de despertarse, aunque también puede desencadenarse por períodos prolongados de pie o al levantarse de una posición sentada.
La fascia plantar es una banda de tejido, llamada fascia, que conecta el hueso del talón con la base de los dedos del pie. Sostiene el arco del pie y absorbe los impactos al caminar.
La tensión y el estrés en la fascia pueden causar pequeños desgarros. El estiramiento y desgarro repetidos de la fascia pueden irritarla o inflamarla, aunque la causa permanece poco clara en muchos casos de fascitis plantar.
Aunque la fascitis plantar puede desarrollarse sin una causa obvia, algunos factores pueden aumentar el riesgo de desarrollar esta afección. Estos incluyen:
Ignorar la fascitis plantar puede provocar dolor crónico en el talón que dificulta sus actividades cotidianas. Es probable que cambie su forma de caminar para intentar evitar el dolor de la fascitis plantar, lo que podría provocar problemas en el pie, la rodilla, la cadera o la espalda.
La fascitis plantar se diagnostica en función de su historial médico y de una exploración física. Durante la exploración, su profesional sanitario comprobará si hay zonas doloridas en el pie. La localización del dolor puede ayudar a determinar su causa.
Por lo general, no se necesitan pruebas. Es posible que su profesional sanitario le sugiera una radiografía o una resonancia magnética para asegurarse de que otro problema, como una fractura por estrés, no sea la causa de su dolor.
A veces, una radiografía muestra un fragmento de hueso que sobresale del hueso del talón. Esto se denomina espolón óseo. En el pasado, estos espolones óseos se atribuían a menudo al dolor de talón y se extirpaban quirúrgicamente. Pero muchas personas que tienen espolones óseos en los talones no tienen dolor de talón.
La mayoría de las personas que tienen fascitis plantar se recuperan en varios meses con tratamiento conservador, como aplicar hielo en el área dolorosa, estiramientos y modificar o evitar actividades que causan dolor. Medicamentos Los analgésicos que puedes comprar sin receta, como el ibuprofeno (Advil, Motrin IB, otros) y el naproxeno sódico (Aleve), pueden aliviar el dolor y la inflamación de la fascitis plantar. Terapias La terapia física o el uso de dispositivos especiales podrían aliviar los síntomas. El tratamiento puede incluir: Terapia física. Un fisioterapeuta puede mostrarte ejercicios para estirar la fascia plantar y el tendón de Aquiles y fortalecer los músculos de la parte inferior de la pierna. Un terapeuta también podría enseñarte a aplicar vendaje atlético para apoyar la planta del pie. Férulas nocturnas. Tu equipo de atención podría recomendarte que uses una férula que mantenga la fascia plantar y el tendón de Aquiles en una posición alargada durante la noche para promover el estiramiento mientras duermes. Ortesis. Tu profesional de la salud podría recetarte soportes de arco prefabricados o hechos a medida, llamados ortesis, para distribuir la presión en tus pies de manera más uniforme. Bota para caminar, bastones o muletas. Tu profesional de la salud podría sugerirte uno de estos por un breve período, ya sea para evitar que muevas tu pie o para evitar que coloques todo tu peso sobre tu pie. Procedimientos quirúrgicos u otros Si las medidas más conservadoras no funcionan después de varios meses, tu profesional de la salud podría recomendar: Inyecciones. Inyectar medicamento esteroide en el área sensible puede proporcionar alivio temporal del dolor. No se recomiendan múltiples inyecciones porque pueden debilitar tu fascia plantar y posiblemente causar su ruptura. El plasma rico en plaquetas obtenido de tu propia sangre puede inyectarse en el área sensible para promover la curación del tejido. La imagen de ultrasonido durante las inyecciones puede ayudar en la colocación precisa de la aguja. Terapia de ondas de choque extracorpóreas. Las ondas de sonido se dirigen al área del dolor en el talón para estimular la curación. Esto es para la fascitis plantar crónica que no ha respondido a tratamientos más conservadores. Algunos estudios muestran resultados prometedores, aunque esta terapia no ha demostrado ser consistentemente efectiva. Reparación tisular ultrasónica. Esta tecnología mínimamente invasiva utiliza imágenes de ultrasonido para guiar una sonda similar a una aguja en el tejido dañado de la fascia plantar. Luego, la punta de la sonda vibra rápidamente para descomponer el tejido dañado, que se succiona. Cirugía. Pocas personas necesitan cirugía para separar la fascia plantar del hueso del talón. Generalmente es una opción solo cuando el dolor es grave y otros tratamientos han fallado. Se puede hacer como un procedimiento abierto o a través de una pequeña incisión con anestesia local. Solicitar una cita Hay un problema con la información resaltada a continuación y vuelva a enviar el formulario. De Mayo Clinic a su bandeja de entrada Regístrese gratis y manténgase al día sobre avances en investigación, consejos de salud, temas de salud actuales y experiencia en el manejo de la salud. Haga clic aquí para obtener una vista previa del correo electrónico. Dirección de correo electrónico 1 Error El campo de correo electrónico es obligatorio Error Incluya una dirección de correo electrónico válida Obtenga más información sobre el uso de datos de Mayo Clinic. Para brindarle la información más relevante y útil, y comprender qué información es beneficiosa, podemos combinar su información de correo electrónico y uso del sitio web con otra información que tenemos sobre usted. Si es un paciente de Mayo Clinic, esto podría incluir información de salud protegida. Si combinamos esta información con su información de salud protegida, trataremos toda esa información como información de salud protegida y solo usaremos o divulgaremos esa información según lo establecido en nuestro aviso de prácticas de privacidad. Puede optar por no recibir comunicaciones por correo electrónico en cualquier momento haciendo clic en el enlace de cancelación de suscripción en el correo electrónico. ¡Suscríbase! ¡Gracias por suscribirse! Pronto comenzará a recibir la información de salud más reciente de Mayo Clinic que solicitó en su bandeja de entrada. Lo sentimos, algo salió mal con su suscripción Por favor, inténtelo de nuevo en un par de minutos Reintentar
Su profesional de atención médica podría derivarlo a alguien que se especialice en trastornos del pie o medicina deportiva. Qué puede hacer Haga una lista de: Sus síntomas y cuándo comenzaron. Información personal clave, incluido su historial médico y el de su familia, y las actividades que realiza que podrían haber contribuido a sus síntomas. Medicamentos, vitaminas u otros suplementos que toma, incluidas las dosis. Preguntas para hacerle al equipo de atención médica. Para la fascitis plantar, las preguntas básicas que debe hacerle a su equipo de atención médica incluyen: ¿Qué es lo que probablemente está causando mis síntomas? ¿Qué pruebas necesito? ¿Es probable que mi afección sea temporal o crónica? ¿Cuál es el mejor curso de acción? ¿Existen otras opciones de tratamiento además de la que sugiere? ¿Hay restricciones que deba seguir? ¿Hay folletos u otro material impreso que pueda tener? ¿Qué sitios web recomienda? No dude en hacer otras preguntas. Qué esperar de su médico Es probable que su profesional de atención médica le haga preguntas, como: ¿Sus síntomas tienden a ocurrir a una hora específica del día? ¿Qué tipo de zapatos suele usar? ¿Es corredor o participa en algún deporte que implique correr? ¿Tiene un trabajo físicamente exigente? ¿Ha tenido problemas con sus pies antes? ¿Siente dolor en alguna parte además de los pies? ¿Qué, si acaso, parece mejorar sus síntomas? ¿Qué, si acaso, parece empeorar sus síntomas? Por el personal de Mayo Clinic
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