En el polihidramnios, se acumula un aumento de líquido amniótico en el útero durante el embarazo. Los casos leves de polihidramnios pueden desaparecer por sí solos. Los casos graves pueden requerir tratamiento.
El polihidramnios (pol-e-hi-DRAM-nee-os) es la acumulación de un aumento de líquido amniótico, el líquido que rodea al bebé en el útero durante el embarazo. El polihidramnios ocurre en aproximadamente un 1% a un 2% de los embarazos.
La mayoría de las veces, la afección es leve. A menudo se detecta durante las etapas intermedias o posteriores del embarazo. El polihidramnios grave puede causar dificultad para respirar, parto prematuro u otros síntomas.
Si se entera de que tiene polihidramnios, su equipo de atención médica realiza un seguimiento cuidadoso de su embarazo para ayudar a prevenir problemas de salud. El tratamiento depende de la gravedad de la afección. El polihidramnios leve puede desaparecer por sí solo. El polihidramnios grave puede requerir una vigilancia más estrecha por parte de su equipo de atención.
Los síntomas del polihidramnios pueden estar relacionados con la acumulación de líquido amniótico que crea presión dentro del útero y en los órganos cercanos. El polihidramnios leve a menudo causa pocos o ningún síntoma. Pero las formas graves de la afección pueden causar: Falta de aliento o dificultad para respirar. Hinchazón en los tobillos o pies. Dolor en el área del estómago. Sensación de tensión en los músculos del útero, llamadas contracciones. Su profesional de la salud también puede sospechar polihidramnios si su útero se ha agrandado para la cantidad de semanas de embarazo.
Algunas de las causas conocidas de polihidramnios incluyen:
A menudo, la causa del polihidramnios no está clara, especialmente cuando la afección es leve.
Los factores de riesgo para el polihidramnios incluyen ciertas afecciones que se desarrollan durante el embarazo, como la diabetes gestacional. Una afección que afecta al feto en desarrollo, como un problema en el tracto digestivo, el sistema nervioso central u otros órganos, también puede aumentar el riesgo de polihidramnios.
El polihidramnios se relaciona con:
Generalmente, los problemas de salud más graves están relacionados con el polihidramnios severo.
Para averiguar si tiene polihidramnios, probablemente le harán una ecografía fetal. Esta prueba utiliza ondas sonoras de alta frecuencia para crear imágenes de su bebé nonato en un monitor.
Los profesionales de la salud pueden detectar polihidramnios midiendo el bolsillo más grande de líquido amniótico alrededor del bebé. Esto se llama el bolsillo vertical máximo (PVM). O pueden medir el líquido en los cuatro cuadrantes del útero, también llamado índice de líquido amniótico (ILA). El polihidramnios se diagnostica si el PVM es de 8 o más, o si el ILA es de 24 o más.
Según el momento y la gravedad del polihidramnios, su equipo de atención médica puede recomendar otras pruebas para intentar determinar la causa del polihidramnios:
Su equipo de atención médica realiza un seguimiento estrecho de su embarazo si tiene polihidramnios. Puede recibir los siguientes exámenes:
El polihidramnios leve rara vez necesita tratamiento. Puede desaparecer por sí solo.
De lo contrario, el tratamiento de una causa subyacente, como la diabetes, puede ayudar a eliminar el polihidramnios.
Es posible que necesite tratamiento en el hospital si tiene polihidramnios grave con síntomas como dificultad para respirar, dolor de estómago o contracciones. El tratamiento del polihidramnios puede incluir:
Después del tratamiento, es probable que su equipo de atención médica quiera controlar su nivel de líquido amniótico aproximadamente cada 1 a 3 semanas.
Si tiene polihidramnios leve o moderado, su equipo de atención probablemente planeará que dé a luz a su bebé a las 39 o 40 semanas. Si tiene polihidramnios grave, su equipo probablemente hablará sobre el momento adecuado del parto. El objetivo es reducir las posibilidades de problemas de salud para usted y su bebé.
Tener polihidramnios puede ser estresante. Pero su equipo de atención médica está ahí para usted. Trabajen juntos para asegurar que usted y su bebé reciban la mejor atención posible.
Es probable que empiece hablando con su profesional de atención del embarazo. Aquí tiene información para ayudarla a prepararse para su cita. Qué puede hacer Antes de su cita: Anote cualquier síntoma que haya tenido. Incluya cuándo comenzaron y cómo han cambiado con el tiempo. Anote información personal clave, incluidas otras afecciones médicas para las que está recibiendo tratamiento. Haga una lista de todos los medicamentos, vitaminas o suplementos que esté tomando. Incluya las cantidades que toma, llamadas dosis. Pida a un amigo o familiar que la acompañe. Tener a alguien más con usted en la revisión puede ayudarla a recordar algo que olvidó o que pasó por alto. Anote las preguntas que quiere hacerle a su equipo de atención médica. Preparar una lista de preguntas la ayudará a aprovechar al máximo su tiempo con su médico y otros profesionales de la salud. Para el polihidramnios, algunas preguntas básicas que debe hacer incluyen: ¿Qué tipo de pruebas necesito? ¿Cuándo necesito hacerme las pruebas? ¿Qué enfoque de tratamiento recomienda? ¿Necesito limitar alguna de mis actividades? ¿Qué síntomas de emergencia debo observar en casa? ¿Cómo podría esta afección afectar a mi bebé? Si vuelvo a quedar embarazada, ¿volverá a ocurrir esto? ¿Tiene alguna información impresa que pueda llevarme conmigo? ¿Qué sitios web recomienda para obtener más información? Qué esperar de su médico Es probable que su profesional de la salud le realice un examen físico y algunas pruebas, incluida una ecografía. Es posible que le hagan preguntas como: ¿Cuándo empezó a tener síntomas? ¿Sus síntomas han sido constantes o van y vienen? ¿Tiene dificultad para respirar? ¿Ha sentido mareos o aturdimiento? ¿Ha notado un aumento de la hinchazón? ¿Parece que está reteniendo más líquido de lo habitual? ¿Qué, si acaso, parece mejorar sus síntomas? ¿Qué, si acaso, parece empeorar sus síntomas? Por el personal de Mayo Clinic
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