Tímpano Roto (Tímpano Perforado)

Un tímpano perforado (perforación de la membrana timpánica) es un agujero o desgarro en el tejido delgado que separa el canal auditivo del oído medio (tímpano).

Un tímpano perforado puede provocar pérdida de audición. También puede hacer que el oído medio sea vulnerable a las infecciones.

Un tímpano perforado generalmente sana en unas pocas semanas sin tratamiento. Pero a veces requiere un parche o reparación quirúrgica para sanar.

Signos y síntomas de un tímpano roto pueden incluir:

• Dolor de oído que puede disminuir rápidamente
• Drenaje del oído con aspecto de moco, pus o sangre
• Pérdida de audición
• Zumbido en el oído (tinnitus)
• Sensación de giro (vértigo)
• Náuseas o vómitos que pueden ser consecuencia del vértigo

Llame a su proveedor de atención médica si tiene signos o síntomas de un tímpano perforado. El oído medio e interno están compuestos por estructuras delicadas que son sensibles a las lesiones o enfermedades. Es importante tratar de averiguar la causa de los síntomas del oído y determinar si se ha producido una perforación del tímpano.

Las causas de un tímpano roto (perforado) pueden incluir:

• Infección del oído medio (otitis media). Una infección del oído medio a menudo provoca la acumulación de líquidos en el oído medio. La presión de estos líquidos puede provocar la rotura del tímpano.

• Barotrauma. El barotrauma es la tensión ejercida sobre el tímpano cuando la presión del aire en el oído medio y la presión del aire en el ambiente no están equilibradas. Si la presión es severa, el tímpano puede romperse. El barotrauma suele ser causado por cambios en la presión del aire asociados con los viajes en avión.

  Otros eventos que pueden causar cambios repentinos de presión, y posiblemente la rotura del tímpano, incluyen el buceo y un golpe directo en el oído, como el impacto de una bolsa de aire de un automóvil.

• Sonidos fuertes o explosiones (trauma acústico). Un sonido fuerte o una explosión, como la de una explosión o un disparo —esencialmente una onda sonora abrumadora— rara vez puede causar un desgarro en el tímpano.

• Objetos extraños en el oído. Objetos pequeños, como un hisopo de algodón o una horquilla, pueden perforar o desgarrar el tímpano.

• Traumatismo craneal severo. Una lesión grave, como una fractura de la base del cráneo, puede causar la dislocación o daño a las estructuras del oído medio e interno, incluido el tímpano.

El tímpano (membrana timpánica) tiene dos funciones principales:

• Audición. Cuando las ondas sonoras lo golpean, el tímpano vibra; este es el primer paso mediante el cual las estructuras del oído medio e interno traducen las ondas sonoras en impulsos nerviosos.
• Protección. El tímpano también actúa como barrera, protegiendo el oído medio del agua, las bacterias y otras sustancias extrañas.

Si el tímpano se rompe, pueden producirse problemas poco comunes, especialmente si no cicatriza por sí solo después de tres a seis meses. Las posibles complicaciones incluyen:

• Pérdida de audición. Por lo general, la pérdida de audición es temporal y dura hasta que la rotura o el agujero del tímpano han cicatrizado. El tamaño y la ubicación de la rotura pueden afectar el grado de pérdida auditiva.
• Infección del oído medio (otitis media). Un tímpano roto (perforado) puede permitir que las bacterias entren en el oído. Si un tímpano perforado no cicatriza, un pequeño número de personas puede ser vulnerable a infecciones continuas (recurrentes o crónicas). En este pequeño grupo, puede producirse drenaje crónico y pérdida de audición.
• Quiste del oído medio (colesteatoma). Aunque muy raro, este quiste, que está compuesto de células de la piel y otros desechos, puede desarrollarse en el oído medio como resultado a largo plazo de la rotura del tímpano.

Los desechos del canal auditivo normalmente viajan al oído externo con la ayuda del cerumen protector del oído. Si el tímpano está roto, los desechos de la piel pueden pasar al oído medio y formar un quiste.

Un quiste en el oído medio proporciona un ambiente favorable para las bacterias y contiene proteínas que pueden dañar los huesos del oído medio.

Siga estos consejos para evitar el tímpano roto (perforado):

• Busque tratamiento para las infecciones del oído medio. Esté atento a los signos y síntomas de la infección del oído medio, como dolor de oído, fiebre, congestión nasal y disminución de la audición. Los niños con infecciones del oído medio a menudo están inquietos y pueden negarse a comer. Busque una evaluación rápida de su proveedor para prevenir posibles daños al tímpano.
• Proteja sus oídos durante el vuelo. Si es posible, no vuele si tiene un resfriado o una alergia activa que cause congestión nasal o de oído. Durante los despegues y aterrizajes, mantenga los oídos despejados con tapones para los oídos que igualen la presión, bostezando o masticando chicle. O use la maniobra de Valsalva: empuje suavemente el aire hacia la nariz, como si se sonara la nariz, mientras se pellizca las fosas nasales y mantiene la boca cerrada. No duerma durante los ascensos y descensos.
• Mantenga sus oídos libres de objetos extraños. Nunca intente extraer el exceso de cerumen endurecido con artículos como un hisopo de algodón, un clip o una horquilla. Estos artículos pueden romper o perforar fácilmente el tímpano. Enseñe a sus hijos sobre el daño que pueden causar al introducir objetos extraños en sus oídos.
• Protéjase de los ruidos explosivos. Evite las actividades que expongan los oídos a explosiones. Si sus pasatiempos o trabajo implican actividades planificadas que producen ruido explosivo, proteja sus oídos de daños innecesarios usando tapones para los oídos o orejeras.

Su proveedor o un especialista en otorrinolaringología (ENT) a menudo pueden determinar si tiene un tímpano roto (perforado) con una inspección visual usando un instrumento iluminado (otoscopio o microscopio).

Su proveedor puede realizar u ordenar pruebas adicionales para determinar la causa de sus síntomas en el oído o para detectar la presencia de cualquier pérdida auditiva. Estas pruebas incluyen:

Evaluación con diapasón. Los diapasones son instrumentos metálicos de dos puntas que producen sonidos cuando se golpean. Las pruebas simples con diapasones pueden ayudar a su proveedor a detectar la pérdida auditiva.

Una evaluación con diapasón también puede revelar si la pérdida auditiva es causada por daño a las partes vibratorias del oído medio (incluido el tímpano), daño a los sensores o nervios del oído interno, o daño a ambos.

• Pruebas de laboratorio. Si hay secreción del oído, su proveedor puede ordenar una prueba de laboratorio o un cultivo para detectar una infección bacteriana del oído medio.
• Evaluación con diapasón. Los diapasones son instrumentos metálicos de dos puntas que producen sonidos cuando se golpean. Las pruebas simples con diapasones pueden ayudar a su proveedor a detectar la pérdida auditiva.

Una evaluación con diapasón también puede revelar si la pérdida auditiva es causada por daño a las partes vibratorias del oído medio (incluido el tímpano), daño a los sensores o nervios del oído interno, o daño a ambos.

• Timpanometría. Un timpanómetro utiliza un dispositivo insertado en el canal auditivo que mide la respuesta del tímpano a pequeños cambios en la presión del aire. Ciertos patrones de respuesta pueden indicar un tímpano perforado.
• Examen de audiología. Esta es una serie de pruebas que miden qué tan bien oye los sonidos a diferentes volúmenes y tonos. Las pruebas se realizan en una cabina insonorizada.

La mayoría de los tímpanos rotos (perforados) sanan sin tratamiento en unas pocas semanas. Es posible que su proveedor le recete gotas antibióticas si hay evidencia de infección. Si el desgarro o el agujero en el tímpano no sana por sí solo, el tratamiento probablemente implicará procedimientos para cerrar el desgarro o el agujero. Estos pueden incluir:

Parche de tímpano. Si el desgarro o el agujero en el tímpano no se cierra por sí solo, un especialista en otorrinolaringología puede sellarlo con un parche de papel (o un parche hecho de otro material).

Con este procedimiento ambulatorio, su otorrinolaringólogo puede aplicar un químico a los bordes del desgarro, lo que puede promover la cicatrización del tímpano, y luego aplicar un parche sobre el agujero. Es posible que el procedimiento deba repetirse más de una vez antes de que se cierre el agujero.

Cirugía. Si un parche no produce una cicatrización adecuada o su otorrinolaringólogo determina que es poco probable que el desgarro sane con un parche, él o ella pueden recomendar una cirugía.

El procedimiento quirúrgico más común se llama timpanoplastia. Su cirujano injerta un parche de su propio tejido para cerrar el agujero en el tímpano. Este procedimiento se realiza de forma ambulatoria. En un procedimiento ambulatorio, generalmente puede irse a casa el mismo día, a menos que las condiciones de anestesia médica requieran una estadía hospitalaria más prolongada.

En algunos casos, su cirujano trata un tímpano roto con un procedimiento llamado timpanoplastia. Su cirujano injerta un pequeño parche de su propio tejido para cerrar el agujero en el tímpano.

• Parche de tímpano. Si el desgarro o el agujero en el tímpano no se cierra por sí solo, un especialista en otorrinolaringología puede sellarlo con un parche de papel (o un parche hecho de otro material).

  Con este procedimiento ambulatorio, su otorrinolaringólogo puede aplicar un químico a los bordes del desgarro, lo que puede promover la cicatrización del tímpano, y luego aplicar un parche sobre el agujero. Es posible que el procedimiento deba repetirse más de una vez antes de que se cierre el agujero.

• Cirugía. Si un parche no produce una cicatrización adecuada o su otorrinolaringólogo determina que es poco probable que el desgarro sane con un parche, él o ella pueden recomendar una cirugía.

  El procedimiento quirúrgico más común se llama timpanoplastia. Su cirujano injerta un parche de su propio tejido para cerrar el agujero en el tímpano. Este procedimiento se realiza de forma ambulatoria. En un procedimiento ambulatorio, generalmente puede irse a casa el mismo día, a menos que las condiciones de anestesia médica requieran una estadía hospitalaria más prolongada.

Un tímpano roto (perforado) generalmente sana por sí solo en cuestión de semanas. En algunos casos, la curación tarda meses. Hasta que su proveedor le diga que su oído está curado, protéjalo de la siguiente manera:

• Manteniendo el oído seco. Coloque un tapón para oídos de silicona impermeable o una bolita de algodón cubierta con vaselina en el oído al ducharse o bañarse.
• Abstenerse de limpiarse los oídos. Dele tiempo al tímpano para que sane completamente.
• Evitar sonarse la nariz. La presión creada al sonarse la nariz puede dañar el tímpano en proceso de cicatrización.