Varicocele

Un varicocele es una dilatación de las venas que transportan sangre desoxigenada desde el testículo.

Un varicocele (VAR-ih-koe-seel) es una dilatación de las venas dentro del saco laxo de piel que contiene los testículos (escroto). Estas venas transportan sangre desoxigenada desde los testículos. Un varicocele ocurre cuando la sangre se acumula en las venas en lugar de circular eficientemente fuera del escroto.

Los varicoceles generalmente se forman durante la pubertad y se desarrollan con el tiempo. Pueden causar cierta molestia o dolor, pero a menudo no producen síntomas o complicaciones.

Un varicocele puede causar un desarrollo deficiente de un testículo, una baja producción de espermatozoides u otros problemas que pueden provocar infertilidad. Puede recomendarse una cirugía para tratar el varicocele para abordar estas complicaciones.

Un varicocele generalmente ocurre en el lado izquierdo del escroto y, a menudo, no produce signos ni síntomas. Los posibles signos y síntomas pueden incluir: Dolor. Es más probable que se presente un dolor sordo o molestia cuando se está de pie o al final del día. Acostarse a menudo alivia el dolor. Una masa en el escroto. Si un varicocele es lo suficientemente grande, puede verse una masa como un "saco de gusanos" sobre el testículo. Un varicocele más pequeño puede ser demasiado pequeño para verse, pero perceptible al tacto. Testículos de diferente tamaño. El testículo afectado puede ser notablemente más pequeño que el otro testículo. Infertilidad. Un varicocele puede provocar dificultades para engendrar un hijo, pero no todos los varicoceles causan infertilidad. Las visitas anuales de bienestar para los niños son importantes para controlar el desarrollo y la salud de los testículos. Es importante programar y mantener estas citas. Varias afecciones podrían contribuir al dolor, la hinchazón o una masa en el escroto. Si experimenta alguno de estos síntomas, consulte a su proveedor de atención médica para obtener un diagnóstico oportuno y preciso.

Las visitas anuales de bienestar para niños son importantes para controlar el desarrollo y la salud de los testículos. Es importante programar y mantener estas citas.

Varias afecciones podrían contribuir al dolor, la hinchazón o una masa en el escroto. Si experimenta alguno de estos síntomas, consulte a su proveedor de atención médica para obtener un diagnóstico oportuno y preciso.

Los testículos reciben sangre rica en oxígeno de dos arterias testiculares, una arteria para cada lado del escroto. Del mismo modo, también hay dos venas testiculares que transportan sangre pobre en oxígeno de regreso hacia el corazón. Dentro de cada lado del escroto, una red de venas pequeñas (plexo pampiniforme) transporta la sangre pobre en oxígeno del testículo a la vena testicular principal. Un varicocele es la ampliación del plexo pampiniforme. Se desconoce la causa exacta de un varicocele. Un factor que puede contribuir puede ser el mal funcionamiento de las válvulas dentro de las venas que están destinadas a mantener la sangre moviéndose en la dirección correcta. Además, la vena testicular izquierda sigue un camino ligeramente diferente al de la vena derecha, un camino que hace que un problema con el flujo sanguíneo sea más probable en el lado izquierdo. Cuando la sangre pobre en oxígeno se acumula en la red de venas, estas se ensanchan (dilatan), creando el varicocele.

No parece haber factores de riesgo significativos para desarrollar un varicocele.

Tener un varicocele puede dificultar que su cuerpo regule la temperatura de los testículos. Puede provocar estrés oxidativo y acumulación de toxinas. Estos factores pueden contribuir a las siguientes complicaciones:

• Mala salud testicular. En los niños que pasan por la pubertad, un varicocele puede inhibir el crecimiento de los testículos, la producción de hormonas y otros factores relacionados con la salud y la función de los testículos. En los hombres, un varicocele puede provocar una disminución gradual del tamaño debido a la pérdida de tejido.
• Infertilidad. Un varicocele no necesariamente causa infertilidad. Se estima que entre el 10% y el 20% de los hombres diagnosticados con varicocele tienen dificultades para engendrar un hijo. Entre los hombres con problemas de fertilidad, aproximadamente el 40% tiene un varicocele.

Su proveedor de atención médica puede diagnosticar un varicocele mediante la inspección visual del escroto y por palpación. Es probable que lo examinen acostado y de pie. Cuando esté de pie, su proveedor de atención médica puede pedirle que respire profundamente, lo sostenga y haga fuerza, similar a la presión durante una evacuación intestinal. Esta técnica (maniobra de Valsalva) puede facilitar el examen de un varicocele. Prueba de diagnóstico por imágenes Es posible que su proveedor de atención médica quiera que se realice una ecografía. La ecografía utiliza ondas sonoras de alta frecuencia para crear imágenes de las estructuras dentro de su cuerpo. Estas imágenes pueden usarse para: Confirmar el diagnóstico o caracterizar el varicocele Eliminar otra afección como posible causa de signos o síntomas Detectar una lesión u otro factor que obstruya el flujo sanguíneo Atención en Mayo Clinic Nuestro atento equipo de expertos de Mayo Clinic puede ayudarlo con sus inquietudes de salud relacionadas con el varicocele Comience aquí Más información Atención de varicocele en Mayo Clinic Ecografía

Un varicocele a menudo no necesita tratamiento. Para un hombre que experimenta infertilidad, la cirugía para corregir el varicocele puede ser parte del plan de tratamiento de fertilidad. Para adolescentes o adultos jóvenes, generalmente aquellos que no buscan tratamiento de fertilidad, un proveedor de atención médica puede sugerir chequeos anuales para controlar cualquier cambio. Se podría recomendar cirugía en las siguientes situaciones: Un testículo que muestra un desarrollo retrasado Bajo conteo de espermatozoides u otras irregularidades en los espermatozoides (generalmente solo se prueba en adultos) Dolor crónico no controlado con analgésicos Cirugía El propósito de la cirugía es sellar la vena afectada para redirigir el flujo sanguíneo a las venas sanas. Esto es posible porque otros dos sistemas de arterias y venas suministran la circulación sanguínea hacia y desde el escroto. Los resultados del tratamiento pueden incluir los siguientes: El testículo afectado eventualmente puede volver a su tamaño esperado. En el caso de un adolescente, el testículo puede "ponerse al día" en el desarrollo. Los recuentos de espermatozoides pueden mejorar y las irregularidades de los espermatozoides pueden corregirse. La cirugía puede mejorar la fertilidad o mejorar la calidad del semen para la fertilización in vitro. Riesgos de la cirugía La reparación de varicocele presenta relativamente pocos riesgos, que podrían incluir: Acumulación de líquido alrededor de los testículos (hidrocele) Recurrencia de varicoceles Infección Daño a una arteria Dolor testicular crónico Acumulación de sangre alrededor del testículo (hematoma) El equilibrio entre los beneficios y los riesgos de la cirugía cambia si el tratamiento es solo para el manejo del dolor. Si bien los varicoceles pueden causar dolor, la mayoría no lo hace. Una persona con varicocele puede tener dolor testicular, pero el dolor puede ser causado por algo más, una causa desconocida o aún no identificada. Cuando la cirugía de varicocele se realiza principalmente para tratar el dolor, existe el riesgo de que el dolor empeore o de que la naturaleza del dolor cambie. Procedimientos quirúrgicos Su cirujano puede detener el flujo de sangre a través de la vena testicular cosiendo o cortando la vena (ligadura). Actualmente se utilizan dos enfoques comunes. Ambos requieren anestesia general y son procedimientos ambulatorios que generalmente le permiten irse a casa el mismo día. Los procedimientos incluyen: Varicocelectomía microscópica. El cirujano realiza una pequeña incisión en la ingle. Con un microscopio potente, el cirujano identifica y liga varias venas pequeñas. El procedimiento generalmente dura de 2 a 3 horas. Varicocelectomía laparoscópica. El cirujano realiza el procedimiento utilizando una cámara de video e instrumentos quirúrgicos unidos a tubos que pasan a través de algunas incisiones muy pequeñas en la parte inferior del abdomen. Debido a que la red de venas es menos compleja por encima de la ingle, hay menos venas que ligar. El procedimiento generalmente dura de 30 a 40 minutos. Recuperación El dolor de esta cirugía generalmente es leve, pero puede continuar durante varios días o semanas. Su médico puede recetarle analgésicos por un período limitado después de la cirugía. Después de eso, su médico puede aconsejarle que tome analgésicos de venta libre, como acetaminofén (Tylenol, otros) o ibuprofeno (Advil, Motrin IB, otros) para aliviar las molestias. Probablemente podrá regresar al trabajo aproximadamente una semana después de la cirugía y reanudar el ejercicio aproximadamente dos semanas después de la cirugía. Pregúntele a su cirujano cuándo puede regresar con seguridad a sus actividades diarias o cuándo puede tener relaciones sexuales. Alternativa a la cirugía: Embolización En este procedimiento, una vena se bloquea creando esencialmente una pequeña presa. Un médico especializado en imágenes (radiólogo) inserta un tubo pequeño en una vena de la ingle o el cuello. Se usa un anestésico local en el sitio de inserción, y es posible que le administren un sedante para reducir las molestias y ayudarlo a relajarse. Usando imágenes en un monitor, el tubo se guía hasta el sitio de tratamiento en la ingle. El radiólogo libera espirales o una solución que causa cicatrización para crear un bloqueo en las venas testiculares. El procedimiento dura aproximadamente una hora. El tiempo de recuperación es corto con solo dolor leve. Probablemente podrá regresar al trabajo en 1 o 2 días y reanudar el ejercicio después de aproximadamente una semana. Pregúntele a su radiólogo cuándo puede reanudar todas las actividades. Solicite una cita