Cirugía de feminización facial

La cirugía de feminización facial incluye una variedad de procedimientos que cambian la forma de la cara para que se vea más femenina. La cirugía puede cambiar el aspecto de los pómulos, la frente, los labios, la mandíbula y la barbilla. Puede incluir trasplantes de cabello o el desplazamiento de la línea del cabello para lograr una frente más pequeña. También podría involucrar cirugía para tensar la piel, como un lifting facial.

Muchas características faciales, incluyendo la mandíbula, la frente y la barbilla, reflejan diferencias sexuales. Mientras que otras partes del cuerpo pueden cubrirse u ocultarse, las características faciales son fáciles de ver. Para algunas personas que tienen una identidad de género que difiere del sexo que se les asignó al nacer, cambiar las características faciales es un paso importante para afirmar su género.

Algunos de los riesgos asociados a la cirugía de feminización facial son los mismos que los riesgos de otros tipos de cirugía mayor, incluyendo: Hemorragia. Infección. Lesión en partes del cuerpo cercanas al sitio quirúrgico. Una mala reacción al medicamento que lo induce a dormir, también llamado anestésico. Otros riesgos de la cirugía de feminización facial incluyen: Cicatrices en la cara. Lesión del nervio facial. La separación de la zona donde se realizó un corte durante la cirugía, llamada incisión. Esto se llama dehiscencia de la herida. Acumulación de líquido debajo de la piel. Esto se llama seroma. Una hinchazón sólida de sangre coagulada dentro de los tejidos. El término médico para esto es hematoma.

Antes de la cirugía, usted se reúne con su cirujano. Trabaje con un cirujano certificado por la junta y con experiencia en procedimientos de feminización facial. Cada persona tiene una estructura facial única. Hable con su cirujano sobre sus expectativas y objetivos para la cirugía. A partir de esa información, el cirujano puede sugerir procedimientos que probablemente cumplan con esos objetivos. El cirujano también puede darle información sobre detalles como el tipo de anestesia que se usará durante la cirugía. Hable con su cirujano sobre la atención de seguimiento que pueda necesitar después de la cirugía. Siga las instrucciones de su equipo de atención médica para prepararse para la cirugía. Esto a menudo incluye pautas sobre alimentación e hidratación. Es posible que deba hacer cambios en los medicamentos que toma. También es posible que deba dejar de usar nicotina, incluidos los cigarrillos electrónicos, fumar y masticar tabaco. Es posible que necesite una tomografía computarizada antes de la cirugía para ayudar con la planificación de la cirugía. La tomografía computarizada puede proporcionar a su cirujano información detallada sobre la estructura de su rostro. Es probable que un miembro de su equipo de atención médica también le tome fotos de la cara antes de la cirugía.